Muchas cosas dicen de la Amazona,
Dizque el pecho derecho se quitaba,
Con el fin de templar muy bien el arco,
Para apuntar donde la flecha daba.
Que Amazona quiere decir sin pecho;
Que prescindir de los hombres era meta;
Y que el placer que brindaban era poco,
Tan solo a medias; con una sola teta.
Que vivían en un país solo de “viejas”,
Que los hombres, por allí no aparecían,
Que solamente una vez, de cuando en cuando,
Llevaban machos: los “putos” les dirían.
Que hermosas eran, las tales Amazonas,
Que de a caballo iban a las batallas,
Mataban hombres de la más vil manera,
Y secuestraban a los de más agallas.
Los secuestrados eran esclavizados:
Los sometían bajo su voz de mando;
Pero estos hombres también eran juzgados,
Y sentenciados a muerte: fornicando.
Algunos hombres, curiosos, tal vez locos,
Tal vez morbosos, que habían en esa era,
Se entregaban a ser sus prisioneros,
Que placer era; morir de esa manera.
☺
1 comentario:
Saludos, primera vez que te leo y tambien primera vez que leo un poema satirico, la verdad me encanto como desarrolaste el tema del amazonas. Genial poema.
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